Meditación - 2021 enero 22

(Lectura de la Biblia en tres años: Job 37, Hechos 27:6–12)

EL PRIMER Y SEGUNDO MANDAMIENTO

“Uno de los maestros de la ley se acercó y los oyó discutiendo. Al ver lo bien que Jesús les había contestado, le preguntó: —De todos los mandamientos, ¿cuál es el más importante? —El más importante es: “Oye, Israel. El Señor nuestro Dios es el único Señor—contestó Jesús—. Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas”. El segundo es: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. No hay otro mandamiento más importante que estos.”

Marcos 12, 28-31

Cuando hay algo muy importante que debo recordar, procuro resumirlo en pocas palabras para que siempre esté presente en mi memoria. Y es que muchas veces lo más importante de algo se puede expresar en sólo unas pocas palabras que, si bien no es algo extenso, ayuda a concentrarse en lo que verdaderamente importa.

Una vez le preguntaron a Jesús: De todos los mandamientos, ¿cuál es el más importante? Dios había dado a su pueblo sus mandamientos en dos tablas de piedra. Eran diez en total y cada uno hablaba de una parte importante que Dios desea en su voluntad que hagamos para tener una vida feliz y sabia. ¿Cómo entonces saber cuál de todos es el más importante? Pero Jesús respondió muy bien: el primero es " Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas" y el segundo es "Ama a tu prójimo como a ti mismo”.

Esto significa que el resumen de toda la ley de Dios es el amor. El amor hace que todas nuestras acciones sean conducidas de manera correcta. Amando a Dios, respetamos su nombre y escuchamos su Palabra con devoción y atención. Amando a nuestro prójimo, nos sometemos a las autoridades, no atentamos contra la vida y el bienestar del otro, amamos y respetamos a nuestro cónyuge, no le hurtamos, no damos falso testimonio acerca de él y tampoco codiciamos nada que sea suyo.

Que su vida sea testimonio del amor, mostrándolo para con Dios y su prójimo, que en eso se resume la ley.

Oración:

Señor ayúdame a mostrar amor hacia ti y mi prójimo. Amén.

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