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El decimotercer domingo después de pentecostés

(Verde)

 

Tema del día: Este mundo pecaminoso se opone a la verdad del evangelio. Los enemigos de la fe atacan a los que creen. Y lamentablemente muchas veces esos enemigos de la fe salen de nuestra propia familia o de nuestros “amigos.” No obstante, Dios nos promete fortalecer por medio de tales tribulaciones y dificultades.

 

La Colecta: Padre misericordioso, que diste en sacrificio por nuestro pecado a tu Hijo unigénito: Concédenos la gracia a fin de que recibamos con gratitud los frutos de su obra redentora y sigamos su camino; por Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor que vive y reina contigo y con el Espíritu Santo, siempre un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

 

La Primera Lectura: Jeremías 23:23-29 Aunque “profetas falsos” se levantan oponiéndose a nosotros y la verdad del evangelio, Dios quiere que nosotros los que tenemos la verdadera doctrina sigamos predicando.

 

23¿Soy yo Dios de cerca solamente, dice Jehová, y no Dios desde muy lejos? 24¿Se ocultará alguno, dice Jehová, en escondrijos que yo no lo vea? ¿No lleno yo, dice Jehová, el cielo y la tierra? 25Yo he oído lo que aquellos profetas dijeron, profetizando mentira en mi nombre, diciendo: Soñé, soñé. 26¿Hasta cuándo estará esto en el corazón de los profetas que profetizan mentira, y que profetizan el engaño de su corazón? 27¿No piensan cómo hacen que mi pueblo se olvide de mi nombre con sus sueños que cada uno cuenta a su compañero, al modo que sus padres se olvidaron de mi nombre por Baal? 28El profeta que tuviere un sueño, cuente el sueño; y aquel a quien fuere mi palabra, cuente mi palabra verdadera. ¿Qué tiene que ver la paja con el trigo? dice Jehová. 29¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como martillo que quebranta la piedra?

 

El Salmo del Día: Salmo 139

 

Al músico principal. Salmo de David.

1 Oh Jehová, tú me has examinado y conocido.

2 Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme;

Has entendido desde lejos mis pensamientos.

3 Has escudriñado mi andar y mi reposo,

Y todos mis caminos te son conocidos.

4 Pues aún no está la palabra en mi lengua,

Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda.

5 Detrás y delante me rodeaste,

Y sobre mí pusiste tu mano.

6 Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí;

Alto es, no lo puedo comprender.

7 ¿A dónde me iré de tu Espíritu?

¿Y a dónde huiré de tu presencia?

8 Si subiere a los cielos, allí estás tú;

Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás.

9 Si tomare las alas del alba

Y habitare en el extremo del mar,

10 Aun allí me guiará tu mano,

Y me asirá tu diestra.

11 Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán;

Aun la noche resplandecerá alrededor de mí.

12 Aun las tinieblas no encubren de ti,

Y la noche resplandece como el día;

Lo mismo te son las tinieblas que la luz.

13 Porque tú formaste mis entrañas;

Tú me hiciste en el vientre de mi madre.

14 Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras;

Estoy maravillado,

Y mi alma lo sabe muy bien.

15 No fue encubierto de ti mi cuerpo,

Bien que en oculto fui formado,

Y entretejido en lo más profundo de la tierra.

16 Mi embrión vieron tus ojos,

Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas

Que fueron luego formadas,

Sin faltar una de ellas.

17 ¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos!

¡Cuán grande es la suma de ellos!

18 Si los enumero, se multiplican más que la arena;

Despierto, y aún estoy contigo.

19 De cierto, oh Dios, harás morir al impío;

Apartaos, pues, de mí, hombres sanguinarios.

20 Porque blasfemias dicen ellos contra ti;

Tus enemigos toman en vano tu nombre.

21 ¿No odio, oh Jehová, a los que te aborrecen,

Y me enardezco contra tus enemigos?

22 Los aborrezco por completo;

Los tengo por enemigos.

23 Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón;

Pruébame y conoce mis pensamientos;

24 Y ve si hay en mí camino de perversidad,

Y guíame en el camino eterno.

 

 

La Segunda Lectura: Hebreos 12:1-13 Lo que sufrimos por causa del evangelio, incluyendo el desprecio de nuestra familia, es disciplina de nuestro Padre celestial para nuestro bien.

 

1Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, 2puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.

3Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar. 4Porque aún no habéis resistido hasta la sangre, combatiendo contra el pecado; 5y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo:

Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor,

Ni desmayes cuando eres reprendido por él;

6 Porque el Señor al que ama, disciplina,

Y azota a todo el que recibe por hijo.

7Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina? 8Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos, y no hijos. 9Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus, y viviremos? 10Y aquéllos, ciertamente por pocos días nos disciplinaban como a ellos les parecía, pero éste para lo que nos es provechoso, para que participemos de su santidad. 11Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados.

12Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; 13y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado.

 

El Versículo: ¡Aleluya! ¡Aleluya! Porque la Palabra de Dios es eficaz, y más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra hasta la división del alma y del espíritu, de las coyunturas y los tuétanos, y es poderosa para discernir los pensamientos y las intenciones del corazón. ¡Aleluya!

 

El Evangelio: Lucas 12:49-53 La verdad del evangelio va a causar divisiones hasta en nuestras propias familias, pero hay que mantenerse firme en esta verdad y proclamarla, cualquier que sea el costo.

 

49Fuego vine a echar en la tierra; ¿y qué quiero, si ya se ha encendido? 50De un bautismo tengo que ser bautizado; y ¡cómo me angustio hasta que se cumpla! 51¿Pensáis que he venido para dar paz en la tierra? Os digo: No, sino disensión. 52Porque de aquí en adelante, cinco en una familia estarán divididos, tres contra dos, y dos contra tres. 53Estará dividido el padre contra el hijo, y el hijo contra el padre; la madre contra la hija, y la hija contra la madre; la suegra contra su nuera, y la nuera contra su suegra.

 

 

 

 

 

 

 

EL ESPÍRITU SANTO GUIA NUESTRA FE EN ESTE MUNDO

 

En la familia de Adán escuchamos una discusión, su hija de 15 años está en embarazo y Eva está diciendo a Adán que van a hacer, esta es una familia creyente en Cristo Jesús y el maligno está haciendo su trabajo, Adán acusa a Eva de descuidada porque ella no enseñó a su hija a planificar y que es el momento de tomar una decisión drástica, el aborto, es lo mejor que debe suceder en ese momento porque el prestigio de la familia en el barrio y en la iglesia debe estar al orden del día. Pero también escuchamos una discusión en la casa de Adán y Eva porque su hijo cayó en las drogas y alcoholismo, Eva está diciendo a Adán que todo es culpa de Él porque nunca ha sido un padre cristiano ejemplar, su hijo a visto a su padre alcoholizado y oliendo al perfume del adulterio, este matrimonio cristiano va camino al divorcio porque el diablo ha logrado su cometido, la división del hogar cristiano. Pero estos dos ejemplos de Adán y Eva, familia creyente, viene desde el Edén, ellos fueron creados a imagen y semejanza de Dios, pero Eva tuvo un conflicto espiritual, ella por unos segundos se sintió reprimida por su Creador y no encontró un sentido de seguir obedeciéndole y por esto termino escuchando la palabra de la serpiente, pero esta familia empezó a ser muy conflictiva puesto que Adán no tuvo el carácter de decir no a Eva y también creyó en la palabra de satanás. Podemos ver que la familia de los primeros padres muestra hoy en día porque vivimos en conflictos en nuestras familias y con nuestros amigos a causa de Jesús y su Palabra.

 

Pensemos en este momento en aquel familiar o amigo que hoy está alejado de nosotros por nuestra fe en Jesús, pensemos en las situaciones que han llevado a este amigo o a nosotros en cortar esta amistad. Recordemos que la amistad que hizo Adán y Eva con el diablo en el Edén fue una amistad de fuego y castigo, ellos rompieron la paz perfecta con el Creador y prefirieron vivir escuchando la Palabra del maligno y es por esto que la muerte hace su trabajo en este mundo. Pero encontramos como el diablo sigue haciendo de las suyas y hace que cada uno de nosotros vivamos momentos difíciles y extremos. Las palabras de Jesús en esta sección del evangelio de hoy son palabras muy fuertes y tal vez nuestra razón no entiende por qué dijo esto pero nuestra carne a vivido el resultado de las mismas: 51¿Pensáis que he venido para dar paz en la tierra? Os digo: No, sino disensión. 52Porque de aquí en adelante, cinco en una familia estarán divididos, tres contra dos, y dos contra tres. 53Estará dividido el padre contra el hijo, y el hijo contra el padre; la madre contra la hija, y la hija contra la madre; la suegra contra su nuera, y la nuera contra su suegra. Lo que dice Jesús en estos versículos son el claro ejemplo de la introducción con el cual empecé el sermón, la familia de Adán y Eva que representan a cada una de nuestras familias, y esto nos recuerda los momentos que hemos tenido divisiones por hacer lo que Jesús manda que hagamos, Adán y Eva, en el momento más difícil de su vida espiritual no estuvieron en la altura que Dios esperaba de ellos, pero nosotros no somos diferentes a ellos porque sabiendo hacer lo bueno no lo hacemos, pensemos en los momentos que hemos hablado con un familiar o amigo homosexual o una amiga lesbiana y hemos aprobado su conducta sexual, recordemos las veces que las noticias dicen que mataron a un criminal y nosotros avalamos la muerte de cualquier persona por el motivo que sea o las veces que hemos estado de acuerdo con el aborto porque viene la creatura con problemas físicos o porque este bebe viene a sufrir en este mundo, pero miremos las veces que no nos hemos sometido a cualquier tipo de autoridad y hemos sido desafiantes con ellos porque nos creemos los más justos y honestos, pero si sigo citando ejemplos realmente nos damos cuenta de lo infieles que hemos sido con Dios y la práctica de su Palabra porque nosotros actuamos más por emociones o por nuestra conciencia haciendo amistad con el diablo y el pecado que por lo que dice Dios y es por esto que las tinieblas eternas son las que merecemos por incumplir el primer y tercer mandamiento.

 

Jesús sintió oposición de su familia, Él fue atacado como Beelzebú, príncipe de los demonios y san Marcos 3:21 nos registra: Cuando lo oyeron los suyos, vinieron para prenderle; porque decían: Está fuera de sí. Y nuestro Señor no tuvo miedo de encalarlos y hacer la voluntad del Padre perfectamente, no le importo que los suyos le consideraran loco por la predicación de la Palabra mostrando que Él era el Mesías esperado y se defendió de todos mostrando que Él no venía del diablo sino de Dios y nuestro Salvador soportó toda esta persecución para que nosotros fuéramos perdonados de nuestro pecado en contra del primer y tercer mandamiento. Pero la obediencia perfecta de Jesús también la vemos en la última etapa de su vida, cuando en este evangelio Él dijo: 49Fuego vine a echar en la tierra; ¿y qué quiero, si ya se ha encendido? 50De un bautismo tengo que ser bautizado; y ¡cómo me angustio hasta que se cumpla! Este versículo está hablando de dos cosas importantes de Jesús, su segunda venida donde Él vendrá con fuego para destruir a todos sus enemigos y usa de manera metafórica la palabra bautismo para hablar de su sufrimiento y muerte, esto le trajo mucha angustia porque sabía todo lo que iba a sufrir, pero con su muerte nosotros hemos sido librados de la muerte eterna, con su muerte encontramos el perdón de cada uno de nuestros pecados cuando hemos hecho amistad con el diablo y es por lo que no seremos destruidos por el fuego eterno sino que la vida eterna en el cielo es el lugar que nos espera porque Jesús siempre puso en primer lugar al Padre y es por esto que hoy nosotros podemos escuchar y entender este mensaje que Jesús no vino a traer la paz con los enemigos sino guerra y juicio para que ellos puedan entender también cuál es la justicia de Dios y este mensaje hoy lo entendemos porque el Espíritu Santo no solamente nos ha traído a creer en la obra de Jesús sino que también nos ayuda en los momentos difíciles que vivimos a causa de nuestra fe a soportar toda la persecución que viene por defender a Jesús y su Palabra.

 

Para los familiares y amigos cercanos incrédulos nosotros somos unos fanáticos y puritanos, pero estas expresiones no nos deben ofender después de escuchar este mensaje, pero tampoco vamos a usar estas expresiones para los hermanos en la fe, porque muchas veces podemos pensar que un hermano al usar bien la Palabra de Dios los llamamos hasta legalista, pero nosotros necesitamos tener el discernimiento de usar bien la Ley y el Evangelio en nuestras vidas, nos esforzamos mucho en aplicar la Ley y el Evangelio en la vida de los demás y no en las nuestras, pero nuestra prioridad somos nosotros porque es nuestra salvación, para ayudar a otros primero necesitamos estar claros en nuestras vidas, conocer cuál es nuestra mayor debilidad porque esta falta de claridad espiritual en nosotros nos lleva a dar un consejo de carga y no de libertad y esto nos anima a recordar que todos nosotros estamos en el mismo nivel y estamos aquí por la misma necesidad, la paz con Dios que nos trae conflictos con este mundo. También por la obra del Espíritu Santo no escucharemos a los mensajeros de Baal, este dios todavía existe y aún da la batalla por nosotros porque quiere que estemos en contra de la Palabra de Dios haciéndonos confundir entre derechos y lo que Dios manda, no escucharemos, ni seguiremos aquellos que quieren llevarnos a practicar el pecado como estar de acuerdo con tener vida sexual con el famoso poliamor o son tan moralistas que nos pueden llevar a creer lo necesario que es el aborto en momentos decisivos o podemos encontrarnos con Baales que aman la anarquía y es por esto que no escucharemos a estas personas y no las seguiremos sino que a nosotros nos importa más mantener la Paz con nuestro Dios. Por esto nosotros necesitamos estar claros en nuestro hablar y no decir la iglesia dice o yo digo porque esta es una manera de disfrazar nuestro pecado, cada vez que nos apartamos de una persona o una práctica pecaminosa es porque la Biblia lo dice, nunca podemos jugar con fuego porque recordemos la Palabra que nos dice Así que, el que piensa estar firme, mire que no caiga, 1 Corintios 10:12. Por esto es necesario tomar decisiones en nuestra vida al alejarnos de personas que aman practicar conductas pecaminosas porque no podemos sentirnos fuertes puesto que recordemos que nuestra carne nos hace pecar. Nosotros no vamos a hacer diferencias o dividirnos con las cosas que la Biblia llama adiáfora, lo que la biblia no manda, ni prohíbe, muchos creen que porque tienen un sistema de adoración que para ellos es mejor y el de nosotros no es bueno porque es muy romano se alejan de nosotros no por doctrina sino por su manera de pensar, por esto es importante entender bien la diferencia entre adiáfora y lo que Dios manda en su Palabra claramente y dejemos que sea el Espíritu Santo quien nos guie al decir no al pecado y decir si al separarnos de personas que nos llevan a prácticas que van en contra de las Escrituras y esto lo hacemos por amor, amor a Dios y su Palabra, amor a nosotros mismos y finalmente por amor a ellos para que puedan entender que aún están a tiempo de huir del juicio de Dios por el poder del evangelio. Amén

 

Algunos himnos sugeridos:

Cantad al Señor:

48 Busca primero el reino de Dios

51 Dios de gracia, Dios de gloria

53 Seguidme a mí

54 Santo Espíritu llena mi vida

55 Serviremos al Señor

56 ¡Alzad la cruz!

81 Con Dios no temeremos

83 Con qué paternal cariño

85 No me abandones, Dios

 

Culto Cristiano:

109 Sosténnos firmes, ¡oh Señor!

129 Castillo fuerte

130 No temas tú

131 Firme en la roca

134 ¡Adelante peregrinos!

161 Dejo el mundo

167 Nada puede ya faltarme

254 ¡Firmes y adelante!

255 Qué mi vida entera esté

247 Mirad y ved

272 Me guía Cristo

273 Mi mano ten

274 No temas ya

403 Estad por Cristo firmes

406 Luchad, luchad por Cristo


Meditaciones son presentadas por Producciones Multilingües-WELS y www.academiacristo.com. Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional. Todas las citas bíblicas, a menos que se indique lo contrario, están tomadas de La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional®, NVI®. Copyright © 1986, 1999, 2015 por Biblica, Inc.™ Todos los derechos reservados en todo el mundo.

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