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Servicio - 25 abril 2021

El cuarto domingo de la pascua

(Blanco)

 

Tema del día: Hoy celebramos el hecho de que Cristo es nuestro "Buen Pastor" quien nos cuida y protege como sus ovejitas queridas. Nosotros que creemos conocemos a nuestro Buen Pastor y lo seguimos con seguridad, aún al andar por "valle de sombra de muerte," porque sabemos que nos protegerá con su mano poderosa.

 

La Colecta: Todopoderoso Dios, Padre de toda misericordia, ya que despertaste de muerte al Gran Pastor de tus ovejas, concédenos tu Espíritu Santo, a fin de que conozcamos la voz de nuestro Pastor y lo sigamos, para que ni el pecado ni la muerte nos arrebate de tu mano; por Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor, que vive y reina contigo y con el Espíritu Santo, siempre un solo Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

 

La Primera Lectura: Hechos 4:23-33 Cuando la congregación en Jerusalén escuchó que los líderes de los judíos habían mandado a Pedro y Juan que no predicaran, ellos pidieron a su Buen Pastor en oración que les diera valor y denuedo para predicar el evangelio aun en medio de peligro. El Señor contestó su oración, dándoles la fuerza y valor para testificar a él.

 

23Y puestos en libertad, vinieron a los suyos y contaron todo lo que los principales sacerdotes y los ancianos les habían dicho. 24Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay; 25que por boca de David tu siervo dijiste:

¿Por qué se amotinan las gentes,

Y los pueblos piensan cosas vanas?

26 Se reunieron los reyes de la tierra,

Y los príncipes se juntaron en uno

Contra el Señor, y contra su Cristo.

27Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, 28para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera. 29Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, 30mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús. 31Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.

32Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común. 33Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia era sobre todos ellos.

 

El Salmo del Día: Salmo 23

Salmo de David.

1 Jehová es mi pastor; nada me faltará.

2 En lugares de delicados pastos me hará descansar;

Junto a aguas de reposo me pastoreará.

3 Confortará mi alma;

Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.

4 Aunque ande en valle de sombra de muerte,

No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo;

Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.

5 Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores;

Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.

6 Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida,

Y en la casa de Jehová moraré por largos días.

 

 

La Segunda Lectura: 1 Juan 3:1-2 Por el amor maravilloso de Dios, nosotros hemos llegado a ser sus hijos queridos. Aunque todavía no podemos ver completamente la grandeza de nuestra herencia, la veremos cuando regrese Cristo para llevarnos al cielo.

 

1Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. 2Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es.

 

El Versículo: ¡Aleluya! ¡Aleluya! Cristo, habiendo resucitado de entre los muertos, no volverá a morir; ya la muerte no tiene dominio sobre él. Yo soy el buen pastor, y conozco mis ovejas y la mías me conocen. ¡Aleluya!

 

El Evangelio: Juan 10:11-18 Jesucristo nos declara que él es nuestro Buen Pastor. En contraste con el asalariado, el cual huye y abandona sus ovejas cuando enfrentado con peligro, Jesús nuestro Buen Pastor da su vida por sus ovejas.

 

11Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. 12Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa. 13Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas. 14Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen, 15así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas. 16También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor. 17Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar. 18Nadie me la quita, sino que yo de mí mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre.

 

 

HIJOS DE DIOS, LA PASCUA FORTALECE NUESTRA RELACIÓN CON EL SEÑOR

 

 

Muchas relaciones hoy en día no son estables porque las personas se creen dueñas de personas, es por esto por lo que frecuentemente escuchamos el termino relaciones tóxicas. En muchas relaciones de novios no hay un conocimiento de la otra persona porque su relación solo se limita al control y no al conocimiento de sus personas para construir una relación estable en este mundo, por lo tanto, llegan al rompimiento de la relación fácilmente y huyen del matrimonio. Muchos hoy en día tienen una relación con su trabajo sencillamente porque es lo único que tienen por hacer, no tienen un trabajo por convicción sino por conveniencia y por esto cambian fácilmente de trabajos. Estos ejemplos muestran que por nuestra naturaleza pecaminosa nuestro comportamiento con personas o con actividades son efímeras y es dificil para el ser humano establecer relaciones duraderas.

 

Como cristianos entendemos que el pecado que hay dentro de nosotros no permite que podamos entender el amor de Dios y establecer una relación con Él. Nos unimos a las palabras de Job ¿Cuántas iniquidades y pecados tengo yo? Hazme entender mi transgresión y mi pecado. Job 13:23. Necesitamos de la ayuda de Dios para entender nuestra transgresión y nuestro pecado. La transgresión hace énfasis en la depravación y perversión del pecado, el termino pecado tiene el sentido de fallar, de no llegar a la meta. Nuestra naturaleza pecaminosa no permite que podamos tener una relación con Dios con nuestros propios medios, nuestro orgullo pecaminoso no permite que podamos tener una relación estable con nuestro Creador. Esta falta de estabilidad espiritual hace que también nosotros lo manifestemos con nuestra relación con los hermanos en la fe, en nuestras familias y con el prójimo en general porque por naturaleza predomina en nosotros los frutos de la carne tal como lo enseña Gálatas 5:19-21 19Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, 20idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, 21envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas. Estos versículos bíblicos muestran que no podemos tener una relación estable con Dios, ni con el prójimo por culpa de nuestra naturaleza pecaminosa. Amar la carne es nuestro pecado de idolatría, es nuestro pecado en contra del primer mandamiento que lo reflejamos al pecar en contra de la segunda tabla de la ley haciendo que cualquier tipo de relación que tengamos la dañemos.

 

Pero también como cristianos damos gracias a Dios que nuestra relación con Él no se basa en lo que nosotros somos o podemos hacer, la relación con Dios es muy diferente en todos los sentidos porque solo depende de lo que Él hizo por nosotros, actualmente tenemos una relación estable con Dios porque viene de Él y solo Él puede mantener esta relación hoy y por siempre. En este cuarto domingo de Pascua celebramos y damos gracias a nuestro Dios porque como lo leemos en el profeta Isaías 43:1 Ahora, así dice Jehová, Creador tuyo, oh Jacob, y Formador tuyo, oh Israel: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú. En este domingo celebramos que pertenecemos al verdadero Dios porque nuestra relación depende de nuestro Buen Pastor. Lo primero que notamos en el evangelio para este día es la expresión con la cual empieza Jesús al decir: YO SOY, esto nos enseña dos cosas, la primera que Él es Dios porque esta usando el mismo nombre que utilizó en la zarza ardiente frente a Moisés Si ellos me preguntaren: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué les responderé? 14Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros. Éxodo 3:13-14. Y la segunda cosa que nos enseña este nombre son las dos naturalezas de Jesús porque Él es completo hombre y Dios, y esto es muy importante para nosotros porque Dios mismo vino a restablecer nuestra relación con Él.

 

La figura que usa nuestro Salvador de Buen Pastor la usa para enseñarnos la clase de relación que tiene con nosotros, somos llamados sus ovejas. Él hizo por nosotros lo que otros no pueden hacer, dio su vida por nosotros, el viernes santo recordamos como en la cruz pagó por todos nuestros pecados, en ella fue crucificada toda nuestra maldad, en ella la relación rota que teníamos con Dios fue restablecida. Esta relación que tenemos con Él es tan estable que le conocemos y este viene por medio del poder de la Palabra de Dios, el jueves santo predicó un hermoso sermón donde explico del poder de la misma Palabra, leemos: 6He manifestado tu nombre a los hombres que del mundo me diste; tuyos eran, y me los diste, y han guardado tu palabra. 7Ahora han conocido que todas las cosas que me has dado, proceden de ti; 8porque las palabras que me diste, les he dado; y ellos las recibieron, y han conocido verdaderamente que salí de ti, y han creído que tú me enviaste. Juan 17:6-8, como creyentes conocemos lo que Él mismo nos ha enseñado en su Palabra, nos enseñó que el Dios Trino, Padre, Hijo y Espíritu Santo están muy involucrados en nuestra salvación puesto que lo escuchamos hoy 15así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre y esta bendición hace que el Espíritu Santo nos recuerde que somos corona de la creación y su deseo no es solamente que le glorifiquemos en este mundo por salvarnos, sino que estemos en el cielo eternamente disfrutando con Él por siempre.

 

Nuestro Señor se compara con un pastor asalariado, es decir solo trabaja porque tiene un pago, demuestra su poco interés en las ovejas cuando ve venir al lobo y sale huyendo, permitiendo que cada oveja corra a salvar su vida terminando cada una de ellas dispersas. En cambio, Jesús vino a este mundo donde el enemigo daño la creación de Dios. Es tanto el daño que este hizo a lo creado por Dios que Romanos 8:22 leemos Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora. Jesús vino al centro del problema, este mundo pecador, enfrento al lobo, satanás y podemos ver como él mismo le tentó en muchas oportunidades para que no fuera el salvador del mundo, conocemos la tentación en el desierto y cuando usó al mismo apóstol Pedro para que le pusiera tropiezo y no ir a Jerusalén. Pero nuestro Buen Pastor no cayó en la tentación por amor a cada uno de nosotros y aún por todo el mundo, el evangelio de hoy nos muestra el alcance de la obra del Buen Pastor 16También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor. La obra de redención de Jesús lo hizo por todo el mundo, este versículo es otra manera de entender lo que nos enseña Juan 3:16 el amor de Dios por el mundo dando a Jesús quien fue perfecto por cada uno de nosotros, puesto que el significado de su vida perfecta la vemos en estos versículos 17Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar. 18Nadie me la quita, sino que yo de mí mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre. Y este mandato lo cumplió por amor a cada uno de nosotros ofreciendo su vida para que tengamos una relación estable y eterna con Dios.

 

Esta relación que Dios estableció con nosotros el Espíritu Santo la transforma, es decir, hace que nuestra vida tenga cimientos en el amor incondicional del Padre dado en nuestro Buen Pastor Jesús. El Espíritu Santo hace que tengamos relaciones perdurables y eternas con nuestros hermanos en la fe, por esto para mantener esta relación dejemos que se cumplan estos versículos en nosotros 22Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23mansedumbre, templanza. Gálatas 5:22-23. Estos dones que vienen del cielo hacen que veamos siempre a nuestros hermanos a través de nuestro Buen Pastor porque Él es el Pastor de todos por igual, su obra y amor fue hecha por cada uno de nosotros y esto nos lleva a vernos como iguales, ese perdón todos lo necesitamos y es necesario vivir en el mismo. El Espíritu Santo hace que cultivemos relaciones sólidas en el matrimonio, hablamos siempre de la relación esposo, esposa y Cristo; esta relacion triangular hace que el esposo tenga un amor sacrificial por su ayuda idónea y ella sabe cual es su apoyo en el matrimonio porque ambos necesitan tener la misma meta en Cristo, estar juntos hasta que la muerte les separe. Como padres, nuestra relación de autoridad frente a nuestros hijos también necesita de la guía del Buen Pastor y esto empieza desde las entrañas de nuestro hogar enseñando la Palabra de Dios y usando la oración frecuentemente. Cómo cristianos tenemos roto nuestra relación con el mundo pecador porque ellos desechan a la Luz, pero Dios nos usa a cada uno de nosotros para que muchos incrédulos puedan ver en la obra de Cristo como desea tener una relación con ellos cumpliendose lo que Pedro nos enseña El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. 2 Pedro 3:9. Mientras partimos del mundo perseveremos en que el mismo Espíritu Santo fortalezca nuestra relación con el Dios Salvador por medio de escudriñar cada día su Palabra y estar alrededor de los sacramentos. Amén

 

Los Himnos:

 

Algunos himnos sugeridos:

Cantad al Señor:

26 El buen Jesús es mi pastor

27 (Cristo es mi alegría!

28 El profundo amor de Cristo

30 Jesús es la roca

31 Manos cariñosas

33 Soy el camino

34 Salvador, Jesús amado

49 Con el buen Jesús andemos

81 Con Dios no temeremos

83 Con qué paternal cariño

84 Cristo, buen pastor, orienta

87 Oh, Dios eterno

 

Culto Cristiano:

159 Cristo Salvador, sé mi guiador

165 Hay una fuente

167 Nada puede faltarme

202 Oí la voz del Salvador

235 Como ovejas celebramos

239 El rey de amor es mi pastor

240 En Jesucristo

242 Jesús es mi pastor

244 Jesús, te necesito

245 Lejos de mi Padre Dios

246 Mi fe descansa en ti

250 (Oh Jesús, pastor divino!

251 (Oh, que amigo nos es Cristo!

405 Jesús es mi rey soberano


Meditaciones son presentadas por Producciones Multilingües-WELS y www.academiacristo.com. Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional. Todas las citas bíblicas, a menos que se indique lo contrario, están tomadas de La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional®, NVI®. Copyright © 1986, 1999, 2015 por Biblica, Inc.™ Todos los derechos reservados en todo el mundo.

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