(Lectura de la Biblia en tres años: Deuteronomio 28:15–45, Lucas 4:7–15)

DIOS NOS DA FELICIDAD

Porque al hombre que le agrada, Dios le da: sabiduría, ciencia, y gozo; pero al pecador le da el trabajo de recoger y amontonar, para dejárselo al que agrada a Dios. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.

(Eclesiastés 2:26)

Todos quieren ser felices y tener éxito en la vida. Pero la verdad es que la felicidad y el éxito algunas veces son difíciles de encontrar. Algunas personas hacen planes y trabajan duro pero nunca son felices o exitosas. Salomón, que escribió las palabras del libro de Eclesiastés, nos da la respuesta de cómo ser feliz y exitoso. Simplemente dice: “Porque al hombre que le agrada, Dios le da sabiduría, ciencia y gozo”. El éxito y la felicidad son dones que vienen de Dios.

Por la gracia de Dios estamos en posición de agradar a Dios. Hemos llegado a conocerlo como a nuestro Salvador. Hemos llegado a conocer su amor por nosotros. Podemos llamarlo nuestro Padre por la fe en Jesús. Nuestro Padre celestial viene y nos da la seguridad de su amor y su promesa de ayudarnos. Un día nos dará la bendición de estar con él en el cielo.

Con esos dones espirituales en nuestra vida, también podemos tener: sabiduría, conocimiento, y felicidad, terrenales. Salomón buscó esos dones terrenales por medio del dinero. Al final tenía que confesar que: la sabiduría, el conocimiento, y la felicidad terrenales, son dones del Señor. La vida bajo el sol solo tiene el sentido verdadero, solo para los cristianos cuya vida real está bajo el Hijo de Dios. Pero aun en nuestra vida terrenal la felicidad es posible. Deje de trabajar por esos dones por usted mismo y confíe en el Señor. Procure agradar a Dios y pídale que haga que su vida en esta tierra sea feliz.

Oración:

Señor, te agradezco el gozo de saber que soy tu hijo. Si es tu voluntad, dame: sabiduría, conocimiento, y felicidad, durante mi vida en la tierra. Amén.

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