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Meditación - 2022 agosto 18

(Lectura de la Biblia en tres años: Levítico 9, Mateo 27:23–31)

VEAMOS LA CORONA Y EL CETRO DE JESÚS

Pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas, y una caña en su mano derecha; e hincando la rodilla delante de él, se burlaban, diciendo:"¡Salve, rey de los judíos!”

Mateo 27:29

Sabemos que un hombre es rey cuando lleva una corona en la cabeza y sostiene un cetro con la mano. Las dos cosas son símbolos que muestran poder de gobernar.

Los soldados de la corte del gobernador romano, Poncio Pilato, pensaron que Jesús quería ser rey terrenal y no conocían la verdad acerca de él. ¿A caso conocían a Jesús antes de recibir la tarea de torturarlo? Ellos pensaban que Jesús era sólo un mero hombre de poca importancia, que había dicho que era el rey de los judíos. No tenían la menor idea que Jesús era el Rey espiritual quien también quería gobernar el corazón de ellos.

Ahora, una pregunta personal: ¿quién es Jesús? ¿Es un alborotador religioso destinado a morir, un gran maestro o un gran orador? Desafortunadamente, hoy en día mucha gente piensa que Jesús ocupaba una de estas tres tareas en su vida.

La corona que los soldados pusieron en la cabeza de Jesús no era una corona de oro y joyas como de costumbre. En lugar de esto, los soldados tejieron una corona de las ramas de un arbusto con espinas que lastimaban cuando las presionaron contra la cabeza de Jesús. Las espinas hicieron que brotara sangre de la frente y de las mejillas de Jesús y le causaron gran dolor.

Sin embargo, el juego que los soldados llevaron a cabo con Jesús, nos dice quién era él realmente. Lo que hicieron para divertirse muestra a Jesús como el Rey con gran poder. Por ejemplo, lea cómo Dios, por medio del apóstol Pablo, describe a su Hijo: "Dios también lo exaltó (a Jesús) sobre todas las cosas y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre" (Filipenses 2:9-11). ¡Estas palabras nos dicen que Jesús es quien gobierna los cielos y la tierra!

Los soldados no sabían que estaban dando un cuadro verdadero acerca de Jesús, pero así fue. La corona de espinas y el cetro no tenían el propósito de darle gloria a Jesús, pero así fue. Lo muestran como el gran Rey que pagó por los pecados de usted, al sufrir a manos de hombres pecadores, y él quiere gobernar en nuestro corazón.

Oración:

Señor Jesús, perdóname cuando me olvide de quién eres y sigue ayudándome a servirte como mi Señor. Amén.

 

Lea el Capítulo Completo Aquí


Meditaciones son presentadas por Producciones Multilingües-WELS y www.academiacristo.com. Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional. Todas las citas bíblicas, a menos que se indique lo contrario, están tomadas de La Santa Biblia, Nueva Versión Internacional®, NVI®. Copyright © 1986, 1999, 2015 por Biblica, Inc.™ Todos los derechos reservados en todo el mundo.

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