(Lectura de la Biblia en tres años: Génesis 1:15–2:3, Mateo 1:8–17)

¿ACASO JESÚS DE NAZARET, ES EL REY DE LOS JUDÍOS?

Pilato mandó que se pusiera sobre la cruz un letrero en el que estuviera escrito: «Jesús de Nazaret, Rey de los judíos.» Muchos de los judíos lo leyeron, porque el sitio en que crucificaron a Jesús estaba cerca de la ciudad. El letrero estaba escrito en arameo, latín y griego. —No escribas “Rey de los judíos” —protestaron ante Pilato los jefes de los sacerdotes judíos—. Era él quien decía ser rey de los judíos. —Lo que he escrito, escrito queda —les contestó Pilato.

—Juan 19:19–22

Cuando los líderes del judaísmo llevaron a Jesús para ser juzgado por Pilato, él le preguntó a Jesús si era un rey. Jesús le dejó en claro que no era un rey en sentido político. ¿Por qué Pilato mandó colocar ese letrero en la cruz?

Los líderes presionaron a Pilato para que condene a Jesús a muerte, argumentando que Jesús pretendía ser el Cristo, aclarando que eso significaría «rey» (Lucas 23:2). Cuando Pilato interrogó a Jesús, le preguntó si él era el rey de los judíos. Jesús le respondió: «―Mi reino no es de este mundo —contestó Jesús—. Si lo fuera, mis propios guardias pelearían para impedir que los judíos me arrestaran. Pero mi reino no es de este mundo. ―¡Así que eres rey! —le dijo Pilato. ―Eres tú quien dice que soy rey. Yo para esto nací, y para esto vine al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo el que está de parte de la verdad escucha mi voz.». Pilato entendió que Jesús era más que un simple ser humano, y que tenía la verdad. Pero Pilato no estaba listo para conocer la verdad y prefirió quedarse con la idea de que Jesús era el rey de los judíos. Tanto los líderes judíos como Pilato preferían pensar que Jesús era un ser humano más. Pilato no halló ningún delito en Jesús pero por la presión del pueblo dejó que lo crucifiquen. Pilato perdió la oportunidad de conocer a Cristo como el Mesías y su Salvador. Nosotros también perdemos la oportunidad de conocer a Jesús como el Mesías y nuestro Salvador cuando insistimos en creer que Jesús es el rey de los judíos. Jesús es el rey del reino de los cielos y si no le conocemos así no conocemos de verdad a Cristo. Él vino para llevarnos a su reino. En gratitud vamos a querer pensar así de Él.

Oración:

Concédeme, Señor, el querer mantener mi mirada en ti y en tu obra redentora, de manera que en mí haya tal gratitud que me mueva a compartir el puro evangelio a los demás sin añadirle requisitos y hablar de ti como el salvador del mundo que un día volverá para juzgar a los vivir y a los muertos. Amén.

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