(Lectura de la Biblia en tres años: Salmo 73, Romanos 15:7–12)

Usado sin darse cuenta

Esto no lo dijo por sí mismo, sino que como era el sumo sacerdote aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la nación

Juan 11:51

Hay ocasiones en las que, de la persona que menos esperamos, hemos recibido ayuda o las palabras que necesitábamos escuchar en un momento difícil. Nos causa mucha sorpresa, y nos damos cuenta que Dios utiliza a las personas para nuestro bien, aun cuando no lo esperamos, y de quien menos lo esperamos.

Caifás, el sumo sacerdote, dice al concilio palabras proféticas sobre lo que toda la nación necesitaba, era necesario que Jesús muriera, para que todos ellos vivieran. Pero como nos dice nuestro texto, él no lo decía por sí mismo, sino que Dios lo estaba usando para profetizar, esto es para comunicar el mensaje de Dios a la gente. Él vio este mensaje como algo necesario para que los romanos no los destruyeran. Jesús era la víctima perfecta para que su pueblo no muriera, pero aún más importante, Jesús fue la víctima escogida por Dios, que se entregó voluntariamente para morir por los pecados de su pueblo y del mundo entero.

La nación judía, merecía morir por causa de sus pecados, pero no solo ellos, sino que todos en el mundo, incluidos tu y yo, merecemos lo mismo, ya que todos pecamos, de pensamiento, palabra y obra. Pero también la profecía que anunció Caifás es para nosotros, aun cuando no somos judíos, la muerte de Jesús, también es por nosotros y para nosotros. Hemos alcanzado el perdón de nuestros pecados, no por nuestros méritos, no por nuestro cumplimiento, sino por la obra perfecta y muerte en la cruz de nuestro Señor Jesucristo.

Caifás fue usado por Dios para anunciar la muerte de nuestro Señor Jesucristo. ahora sigue usando personas pecadoras, como tú y como yo, personas de las cuales tal vez la gente no se imagina que podemos comunicar el mensaje de Dios, pero aun así, Dios sigue usándonos para salvar a la gente por la locura de la predicación (1 Corintios 1:21)

Oración:

Bendito Padre, utilízame para compartir el mensaje de la Salvación ganada por Tu Hijo Jesucristo, aumenta en nosotros tus hijos, el celo por buscar la salvación de los que aún no te conocen. Por Jesucristo tu Hijo, nuestro Señor. Amén

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