(Lectura de la Biblia en tres años: Ezequiel 20:20–44, Santiago 4:1–10)

TIEMPO DE ADVIENTO, DÍA DE LA NATURALEZA HUMANA DE CRISTO

Pero de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre.

Marcos 13:32

Los enemigos de la fe siempre niegan las dos naturalezas de Jesús. Cuando leen versículos como estos dicen: ¿cómo puede ser Dios si no sabe cuándo es el fin del mundo? Hebreos 11:6 dice, Pero sin fe es imposible agradar a Dios, el Espíritu Santo que nos da la fe por medio del Evangelio y el Santo Bautismo nos da la seguridad que las dos naturalezas de Jesús es un misterio y por lo tanto no podemos entender porque en Él encontramos que es cien por ciento hombre y cien por ciento Dios. Estas dos naturalezas no las podemos separar en ningún momento, pero en este versículo hablando en su naturaleza humana y en su estado de humillación no sabe cuando será el fin del mundo, ni los ángeles del cielo lo saben, solamente el Padre sabe el día y la hora. Poner día y hora al fin del mundo es pecar contra la primera tabla de la ley, es querer conocer la mente del Señor y esto merece el castigo eterno en el infierno.

No sabemos el día y la hora, pero el Espíritu Santo nos mantiene preparados. Estamos listos para ese día porque ahora estamos en paz con Dios por medio de Jesús quién tomó en si mismo nuestra naturaleza humana para ser nuestro sustituto y no pecó y cumplió la primera tabla de la ley perfectamente por nosotros. Así, en ese día cuando Él venga por segunda vez encontraremos que seremos puestos a la derecha porque con su sangre nos dio la seguridad que somos hijos de Dios y el Espíritu Santo nos mantiene preparados para la venida del Señor. Por esto hoy confesemos que Jesús tiene su naturaleza humana pero también es Dios quien vendrá a juzgar a los vivos y los muertos. Amén

Oración:

Señor de los cielos, sabes el día y la hora de la venida de Jesús, permite que estemos siempre conectados a Él por la obra del Espíritu Santo. Amén

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